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¿Cómo elegir la cuna del bebé?
Durante el primer año de vida, tu bebé puede pasar de 11 a 18 horas diarias durmiendo y gran parte de este tiempo lo pasa en su cuna. Las sociedades científicas recomiendan que el bebé duerma en su cuna, al lado de su mamá, por lo menos hasta el año de vida. ¡Imaginate lo importante que es para el sueño seguro que la cuna sea lo mejor posible!
Los primeros meses de vida, el bebé puede dormir en una cuna pequeña al lado de su mamá. Debe tener una base muy estable, ya que es común que los hermanitos mayores se cuelguen de la cuna para ver al nuevo bebé, y si no es muy estable, puede tumbarse con el bebé adentro.
Existe una nueva modalidad de cuna para los recién nacidos que se llama cuna colecho. Esta cuna solamente tiene baranda en tres de sus lados, ya que el lado que da a la mamá se aferra a la cama de los padres, y de esta manera el bebé está en íntimo contacto con la mamá, pero en su cuna, sin los riesgos de sofocación o aplastamiento. Luego de los 2 o 3 meses, el moisés o la cuna colecho le quedará chica y ya se podrá pasar a la cuna que utilizará hasta los 2 años.
A la hora de elegir una cuna debemos considerar la seguridad, la facilidad de limpieza, la durabilidad y si bien debe ajustarse a tu presupuesto, recordá que la seguridad es la prioridad.
Una cuna económica que dure hasta los 9 meses puede resultar más cara que una que cueste mucho más pero que dure hasta los 2 años.
Seguridad, ante todo:
La estructura debe ser firme, los barrotes deben tener más de 66 cm de alto desde el colchón y menos de 6 cm de distancia entre ellos. No debe tener pintura descascarada ni piezas sueltas o salientes (ni adentro ni afuera). El colchón debe ser de espuma de alta densidad y debe quedar bien apretado contra los bordes internos de la cuna.
Alrededor de los 9 meses muchos bebés se sostienen de los barrotes y se paran. Si las tetillas superan la altura de la baranda, con sólo asomar la cabeza por encima de la misma pueden caer de cabeza fuera de la cuna. Una baranda de más de 66 cm asegura que la mayoría de los bebés estarán seguros hasta los 2 años.
Practicidad:
Buscá una cuna cuyos materiales y forma sean fáciles de limpiar: pensá que muchos/as bebés regurgitan en su cuna, en muchas ocasiones las deposiciones suelen rebalsar el pañal (sobre todo por la noche) y al sacarlo es muy común que haga pis repentinamente.
Existen cunas (llamadas cunas funcionales) que sirven para el recién nacido, que incluyen una cajonera y un cambiador, con la baranda de altura regulable. Cuando el/la bebé es pequeño se puede bajar un poco la baranda para que sea más cómodo ponerlo y sacarlo, pero a medida que crece se puede subir para que sea más seguro. Cuando el/la bebé ha crecido y sus tetillas superan la altura de la baranda (alrededor de los 2 años), esta se retira y se puede colocar otra pequeña y portátil, que lo proteja de caídas por la noche, pero que le permita bajar y subir de su cama a voluntad. Más adelante se puede sacar la cajonera y el cambiador se convierte en una cama de un niño mayor.
Fuente consultada: Consumer Product Safety Commission USA
Autor: Dr. Martín Gruenberg
Mn 787
Ig @pediatradefamilia
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