¿Cómo cambiarle los pañales a tu bebé?

Los datos más importantes de esta nota son:

  • Tengan todo a mano antes de empezar: pañal limpio, algodón, oleo o toallitas.

  • Limpien la zona del pañal siempre de adelante hacia atrás para prevenir infecciones.

  • Revisen que el pañal quede ajustado, pero sin apretar demasiado.

  • Cada vez que puedan, dejen la cola del bebé o la babé al aire.

¡Cambiar el pañal de tu bebé es una tarea que realizarán hasta 12 veces por día! Aunque al principio puede parecer complicado, es solo cuestión de práctica. Con esta guía paso a paso, en poco tiempo lo harán de manera rápida y segura, cuidando el bienestar y la seguridad del bebé. Dependiendo de la actitud que adopten, cambiar pañales puede ser una molestia o un momento más para conectar con el/la bebé y hacerlo sentir único/a (primer ingrediente para la autoestima).

Piel de bebé:

Cuando queremos decir que algo es muy suave solemos decir que es como la piel de un/unaa bebé, lo cual es cierto, pero también es cierto que es tan suave como delicada, y por eso las dermatitis del pañal son tan frecuentes.  Uno de los irritantes más comunes de la piel es la humedad, ¡y la zona del pañal está expuesta a mucha más humedad que el resto del cuerpo! El pis es 99% agua y la caquita es 95% agua, si además cada vez que cambiamos el pañal lo limpiamos con agua, la dermatitis del pañal será inevitable. Por eso la zona del pañal se debe cuidar con aceites y pomadas, limitando el agua para el baño diario.

Paso a paso: ¿Cómo cambiarle los pañales a tu bebé?

1. Preparen todo lo necesario

Antes de comenzar, asegúrense de tener todos los elementos a mano. Esto incluye un pañal limpio, algodón, oleo calcáreo o aceite de limpieza o toallitas húmedas (asegúrense que no tengan perfume e idealmente que sean en base a aceite). También, tengan una bolsa o cesto donde desechar el pañal sucio. Elijan un lugar cómodo y seguro, como un cambiador o una superficie plana con una toalla limpia. ¡¡¡¡Importantísimo!!!! ¡Nunca dejen al bebé o a la bebé solo/a en el cambiador! ¡Ni por un segundo! Las caídas desde el cambiador son fuente muy frecuente de lesiones traumáticas no intencionales (nuevo nombre de los accidentes).

2. Retiren el pañal sucio

Antes de comenzar lávense las manos con agua y jabón, desabrochen el pañal sucio y levanten suavemente las piernas del bebé o la bebé, sujetándolo/a por los tobillos. Si hay caquita, usen la parte frontal del pañal para retirar la mayor cantidad antes de limpiar con algodón o una toallita, y recuerden siempre limpiar de adelante hacia atrás, sobre todo si es una niña, para evitar infecciones.

3. Limpieza cuidadosa

Usen toallitas húmedas con aceite y sin fragancia, o algodón con óleo calcáreo o aceite de limpieza. Asegúrense de limpiar todos los pliegues de la piel para evitar irritaciones. Una buena limpieza es clave para evitar molestias y mantener la piel sana. Si hizo pis o caquita recientemente, pueden dejarlo/a con la cola al aire para que la piel seque completamente y se regenere más fácilmente.

4. Apliquen pomada (si es necesario)

Si notan que la piel de la zona del pañal está un poco enrojecida o tiende a irritarse, pueden aplicar una capa fina de pomada, especialmente que tenga vitamina A. Esto ayuda a prevenir y tratar las dermatitis causadas por la humedad del pañal.

5. Coloquen el pañal limpio

Deslicen un pañal limpio debajo del bebé o la bebé, la parte trasera debe estar bien posicionada a la altura de la cintura. Ubiquen la parte delantera tratando de que el cordón quede fuera del pañal (pueden hacer un doblez del pañal si es necesario). Cierren los adhesivos laterales del pañal, verificando que quede ajustado, pero no demasiado apretado. Deslicen muy suavemente un dedo de cada lado entre la ingle y el pañal y dirijan hacia afuera las alitas internas, para que el pis quede contenido y no rebalse del pañal.

6. Descarten el pañal sucio

Coloquen el pañal usado en una bolsa o cesto especial para pañales. Si están en casa, pueden optar por un contenedor con tapa para reducir olores. Lávense bien las manos después de cambiar el pañal.

Consejos adicionales

  • Frecuencia: El pañal debe cambiarse cada vez que esté mojado o sucio, recuerden que el exceso de humedad produce dermatitis del pañal. Los y las recién nacidos/as suelen necesitar entre 8 y 12 cambios por día.

  • Cuidado de la piel: Si presenta irritación constante, cambien los pañales más seguido, dejen la cola al aire libre lo más posible, cambien de marca de pañal o toallitas y consulten con el/la pediatra en el próximo control.

  • Nocturnidad: Durante la noche, si no tiene la cola irritada, pueden saltear una cambiada para que el/la bebé pueda dormir más tiempo sin despertarse.

Involucren a la familia

Cambiar pañales no tiene por qué ser una tarea exclusiva de una persona. Papá, mamá, abuelos/as, hermanos mayores de 12 años o cualquier cuidador/a que esté presente puede colaborar. Además, cambiar el pañal también es una oportunidad de fortalecer el vínculo con el/la bebé, pueden hablarle, cantarle, hacerle mimos y hacerlo/a sonreír mientras lo cambian. Involucrar a toda la familia ayuda a que el/la bebé sienta seguridad y afecto de su entorno, y esta es la base para la autoestima.

Siguiendo estos consejos muy sencillos, cambiar los pañales puede convertirse en un momento más de juego y diversión, que además ayudan a fortalecer los lazos, dan seguridad y tranquilidad al bebé o la bebé.

sobre bebés

Los más leidos

Compartí este artículo

x