Cuánto y con qué frecuencia dar la mamadera

Establecer una rutina de alimentación no es una ciencia exacta, y esto puede ser especialmente cierto si tu bebé es recién nacido/a y se alimenta a demanda.

Los/as recién nacidos/as solo necesitarán pequeñas cantidades de leche materna o fórmula infantil en cada toma de mamadera. Como regla general, hacia el final de su primera semana de vida necesitarán aproximadamente 150 - 200 ml de fórmula infantil por kilogramo de peso corporal por día, hasta que tengan 6 meses de edad². Entre las 2 semanas y los 6 meses de edad, puedes esperar que la rutina de alimentación con mamadera de tu bebé consista en alrededor de 5 o 6 tomas al día.

Tené en cuenta que cada bebé es diferente, y pueden diferir en la frecuencia con la que quieren alimentarse y cuánta leche toman cuando lo hacen².

A medida que tu bebé continúa creciendo, ambos aprenderán mucho mientras se conocen más cada día. En cuanto a la alimentación, mientras tu bebé se alimente bien, gane peso y tenga pañales mojados y sucios regularmente², es probable que esté recibiendo la cantidad que necesita. Esto aplica tanto si tu bebé se alimenta con mamadera con fórmula infantil o leche materna.

Es completamente normal que cada bebé quiera alimentarse poco y a menudo, así que no te preocupes si no termina toda la leche en su mamadera y permite que deje de comer cuando esté lleno/a³. Darle más leche a tu bebé de una vez no significa que estará más lleno/a por más tiempo y podría generar más regurgitación después de comer y que aumente demasiado de peso⁴.

Si tu bebé nació prematuramente o con un peso bajo, sus necesidades de alimentación serán diferentes. Cada neonatólogo, neonatóloga o pediatra podrá darte el asesoramiento y la orientación que necesitás sobre sus necesidades de alimentación y qué esperar.

Ya sea que tu bebé se alimente con leche materna o de fórmula, los/as profesionales de la salud recomiendan que los bebés y las bebés se alimenten a demanda⁵. La mayoría de los/as bebés pueden empezar a adaptarse a un horario de alimentación, pero la frecuencia con la que quieran comer puede variar⁵. Esto significa prestar atención a las señales de alimentación y alimentar a tu bebé cuando muestre signos de hambre, que pueden incluir⁵:

• Chuparse las manos y los dedos.

• Buscar la mamadera o la tetina.

• Volverse inquietos.

La frecuencia de las tomas de mamadera de tu bebé dependerá en parte de cuántos meses tenga. Por ejemplo, cada recién nacido/a debe alimentarse cada vez que parezca tener hambre, y en los primeros días después del nacimiento, es posible que se alimente cada 2-3 horas. Durante su primer año, a medida que crecen, es posible que coman con menos frecuencia, necesitando una toma de mamadera cada 3-4 horas.

Aunque no hay necesidad de que sigas un horario de alimentación particular, la mayoría de los/as bebés pueden, y lo harán, establecerse en un horario de alimentación a medida que crecen. Una vez que tu bebé sea mayor, es posible que notes que pueden pasar períodos más largos por la noche sin alimentarse y que su horario de alimentación sea más predecible y establecido.

Las tomas pueden durar hasta 1 hora, y es posible que encuentres que tu bebé se alimenta alrededor de 6 veces al día. A medida que tu bebé se desarrolla, se volverán más eficientes en la alimentación y, como resultado, sus tomas serán más rápidas.

Para medir el tiempo entre las tomas de tu bebé, empezá desde el inicio de una toma hasta el inicio de la siguiente. Por ejemplo, si comienzas a alimentar a tu bebé a las 11 a. m., es probable que tenga hambre nuevamente alrededor de las 2 p. m.

Cuando alimentes a tu bebé con fórmula infantil, es muy importante seguir las indicaciones de preparación exactamente como indica el envase. Para asegurarte de que la leche de tu bebé esté mezclada en las proporciones correctas, tenés que usar la cuchara medidora que incluye el envase.

Nunca agregues polvo adicional a la mamadera de tu bebé, ya que esto puede provocar condiciones como deshidratación y estreñimiento. Tampoco agregues agua adicional, ya que esto puede resultar en que tu bebé no reciba la nutrición que necesita⁶. 

Además, nunca dejes a tu bebé solo/a durante la alimentación y asegurate de usar la tetina del tamaño correcto. De esa manera, vas a saber que tu bebé no está tomando su leche demasiado rápido.

A medida que tu bebé se desarrolla, vas a experimentar cómo aprende nuevas habilidades. Hay muchos cambios para tu bebé en su primer año, como rodar y sentarse, por ejemplo, y alcanzar y agarrar varios objetos. ¡Con este conjunto de habilidades también viene un apetito más grande! Y en este punto, podría ser el momento de iniciar la alimentación complementaria con alimentos sólidos o semisólidos.

Los alimentos sólidos deben introducirse en la dieta de tu bebé gradualmente, junto con las tomas de leche habituales⁷. Esto suele hacerse alrededor de los 6 meses de edad, ya que, para entonces, tu bebé tendrá necesidades nutricionales aumentadas, y estará preparado/a desde el punto de vista del desarrollo para manejar alimentos sólidos.

Hay una serie de señales que pueden indicar que tu bebé está listo/a para los alimentos sólidos. Estas incluyen⁷:

• Sentarse independientemente.

• Mantener la cabeza quieta.

• La capacidad para coordinar sus manos, ojos y boca.

• Mirar y recoger alimentos.

• La capacidad de tragar.

Cuando tu bebé comienza con los alimentos sólidos, es probable que consuma solo una cantidad muy pequeña. En esta etapa, se trata de dejar que tu bebé experimente con nuevos sabores y texturas, y la leche seguirá siendo su principal fuente de energía y nutrientes durante un tiempo más⁷. Gradualmente, la cantidad y variedad de alimentos que tu bebé consume aumentarán.